La muchacha de las bragas naranja

Querida, una cosa que no puedo tolerar en el trabajo es el mal gusto a la hora de vestir. Y si te soy sincera, tu eres la campeona de esta empresa.
No te voy a dar pautas ni directrices de uniformidad, nuestra palabra mágica será: Putón. Una vez que la escuches de mis labios, tendrás siete minutos y medio para abandonar la empresa, en caso contrario el director Asías te introducirá su falo por tu ano en repetidas ocasiones.